Me ejercitaré en estas jaculatorias: ¡Ay Jesús mío! Así como el agua se junta al vino en el santo sacrificio de la Misa, así deseo yo juntarme con Vos y ofrecerme en sacrificio a la Sma. Trinidad. ¡Ay Jesús mío! ¿Qué queréis que haga por vuestro amor? No deseo otra cosa que conocer vuestra voluntad para cumplirla cueste lo que costare.
Propósitos del año 1857; en AEC p. 682